Santander, Cantabria
Una historia sobre la amistad aparece de repente – en medio del camino. Su
prologo: la inscripción en un tablón de cristal, colgado en el interior de una modesta
capilla. A los pies de la capilla reluce
una pradera llena de flores, que solo un par de pasos más adelante se convierte
en un rocoso acantilado, bañado por las olas del inmenso océano.
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La costa entre el
faro Cabo Mayor en Santander y La Maruca
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A la capilla la
llaman “El Panteón del Inglés”. Se eleva sobre el acantilado, al lado de una
senda, que conduce desde el faro de Santander hasta la cercana aldea de
pescadores – La Maruca. El neogótico edificio hecho de piedra gris fue mandado
construir en el año 1892 por José Jackson Veyán. El motivo de la fundación: el
recuerdo de la trágica muerte de William Rowland. El accidente ocurrió en
septiembre del año 1889. Jackson Veyán y
su amigo inglés disfrutaban de una cabalgata por los verdes pastos al lado del
océano. De repente el caballo de Rowland se desbocó, asustado por el ruido del
embravecido mar, y en ese momento cayó junto con su jinete por el precipicio.
José Jackson Veyán
repartía los días entre el trabajo en el telégrafo de Cueto y el cultivo de su
pasión literaria. Escribía artículos, criticas, creaba obras de teatro… Sobre
William Rowland se sabe poco. A su figura solamente la alumbra la luz de la
fama de su abuelo: Robert Rowland Hill, creador del primer sello postal, el
“Penny Black”.
La forma rápida y
moderna de enviar avisos del punto geográfico A al punto geográfico B – la
conocía al dedillo el telegrafista Jackson Veyán. Pero este tipo de mensajes,
aunque fueran transcendentales, solo existirían en el presente. Por lo tanto para
mandar un comunicado que alcanzara el futuro uso un método conocido desde hace siglos.
Mando construir en piedra – sobre el océano, junto al lugar de la tragedia – un
pequeño y encantador edificio. Desde este momento se ocuparon otros de la
transmisión del mensaje sobre la solitaria capilla y el trágico accidente en el
acantilado de Cueto: curiosos, historiadores, escritores, periodistas,
blogueros y turistas con Smartphone. Y aún gira por el mundo el recuerdo del
amigo inglés, el mensaje más conocido del telegrafista de Cueto.
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“El Panteón de Inglés” sobre el acantilado de Cueto
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POST SCRIPTUM
La senda entre el
faro de Cabo Mayor y La Maruca es la continuación de la ruta a lo largo de la
bahía de Santander que atraviesa varias playas. Transcurre por acantilados,
pequeños puentes de madera sobre las rocas. El recorrido cuando se acerca a La
Maruca discurre junto a recónditas playas y el viejo fuerte. El trayecto dura
unos 40 minutos.
Se encuentra
aparcamiento tanto en la playa de La Maruca como en el faro de Cabo Mayor.
Links:// Ruta de la
Costa Norte de Santander en el folleto Rutas por Cantabria.pdf (pagina web:
turismodecantabria.com)
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Camino a La Maruca: por el puente de madera construido sobre el
precipicio
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CANTABRIA
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